Hasta el día de hoy he ido conociendo gente, que por lo cual no es malo, al contrario, me ha facilitado en un gran porcentaje el arduo vivir, me explico, es más por mi personalidad un tanto bipolar que de repente me quedo por un largo tiempo en los extremos, y para ser un poco más objetivo, el lado que más frecuento es el que más se refleja: el lado depresivo, no quiere decir que siempre paso ahí pero la gran mayoría de las cosas me afectan de mala manera, o las tomo muy mal, bueno… siguiendo con el relato; es ese lado que me hace olvidar las cosas y personas que tengo a mi alrededor, ese lado que me hace pensar y cuestionarme todo.Pero a donde quiero llegar, a esa o esas personas que, han pasado (por el momento) por mi existencia, sobre todo por esas personas que han estado en mi "grata" estancia en la universidad (como no... ¬¬!).
Obviamente he conocido personas más que a otras, por otro lado esa cercanía que tienen conmigo es muy agradable; tanto para compartir como para sociabilizar… pero, ¿Realmente se muestran cómo deberían? O más bien ¿Aparentan para estar con otras personas?
Solo quiero argumentar que este artículo solo tomo general a lo que vivo, nada de particularidades.
Me gustaría tomar como ejemplo mi última relación, en qué sentido, de que al darle tanta importancia a la relación me hizo cegarme y olvidarme un tanto de la realidad, o sea, que mi careta en ese momento me orientó a un final que cuesta día a día a asumir.
Siguiendo con mi ejemplo; también se lleva consigo una careta de personalidad, de actos, hechos concretos que compatibiliza increíblemente con uno, paro luego se revelan de esa careta para seguir un pensamiento, un gusto en particular, todo por tratar de buscar una felicidad interna, que es bien pasajera, que ni de la noche a la mañana se consigue, y para que todo esto… para terminar con las manos vacías luego que esa ceguera se vuelva tinieblas que es la realidad misma.
Me han dicho que me he vuelto desconfiado, claro que sí, sobre todo ahora que ni siquiera he tenido oportunidad de volver a rehacer mi vida, solo porque lo he reemplazado por algo que si vale la pena, que obviamente son mis estudios, pero… la verdad solo extraño la sensación de estar con alguien, es una sensación muy cálida, pero solo eso, lo demás seré yo, en todo lugar… ni nadie más.
De lo anterior puedo decir que también tuve esa careta y me quedaba bien hasta el punto del mutuo revelamiento.
Ya van casi tres meses de esa relación, y que me sirva de lección que "no todo lo que brilla es oro", si no también que esa experiencia y esos detalles puntuales se logren aplicar de mejor forma más adelante.
Si bien mi careta actual, o mejor dicho mi esencia aún está intacta, es bueno sacarla a relucir ante gente nueva o féminas, porque según mi círculo de amigos, ellos dicen: "Nico, como persona y amigo vales mucho, no desperdicies tu 'talento', sigue así".
Y para terminar, una frase que siempre digo; cito: "No están demás los amigos en potencia".
